Luego del terremoto interno que significó la renuncia de Máximo Kirchner a la jefatura del bloque en la Cámara de Diputados, el Ministerio de Economía empieza a dar los primeros pasos para sumar adhesiones que le permitan aprobar el acuerdo con el FMI en el Congreso.

Mientras Martín Guzmán estuvo de gira por el exterior, el representante argentino ante el Fondo, Sergio Chodos, se encargó de comenzar a gestionar una serie de encuentros informativos con las principales espadas parlamentarias del oficialismo.

Primero, se acercó al Senado, en donde la semana pasada mantuvo una extensa reunión con el jefe de bloque del oficialismo, José Mayans. El objetivo, en los próximos días, será reunirse también con Sergio Massa y las principales figuras de la Cámara de Diputados, en donde las voluntades del oficialismo están más fraccionadas. Si bien en Casa Rosada insisten en que «ya están garantizados los votos» para aprobar el memorándum de entendimiento con el FMI, existe una base de 30 a 40 diputades que podrían rechazar el acuerdo y dejar a la coalición gobernante en una situación delicada. 

La situación en el Senado

El primer encuentro fue el miércoles por la tarde en el despacho de Mayans en el segundo piso del Senado. Habían pasado dos días desde que el líder de La Cámpora había presentado su dimisión a la presidencia del bloque del Frente de Todos por sus diferencias con el nuevo acuerdo negociado por el gobierno nacional y el FMI, y el Ministerio de Economía pretendía comenzar con una ronda de reuniones informales con los principales referentes parlamentarios que tendrían en sus manos la tarea de conseguir los votos para aprobar el proyecto en el Congreso.

En el Senado, a diferencia de Diputados, les legisladores del FdT han mantenido silencio respecto a si acompañarían o no el entendimiento con el organismo multilateral que el ministro de Economía, Martín Guzmán, está terminando de negociar con el staff del FMI (y que presentará a principios de marzo). Durante la reunión, Chodos incluso tanteó a Mayans y le preguntó por la postura de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, pero no recibió una respuesta concreta.

El escenario en Diputados

En la Cámara de Diputados, por otro lado, el bloque oficialista aún está intentado recuperar cierta normalidad después de la renuncia de Kirchner. La designación de Germán Martínez al frente de la bancada puso paños fríos a la crisis interna y logró evitar una escalada, pero la nueva conducción aún no terminó de acomodarse del todo.

El objetivo del Ministerio de Economía es poder reunirse en los próximos días con Martínez y el presidente de la Cámara, Sergio Massa, así como con los principales referentes parlamentarios de Diputados, pero, en el caso del flamante de jefe de bloque, el encuentro tendrá que esperar. Martínez todavía está terminando de conversar con todos les diputados del oficialismo, a la vez que recién comienza a dialogar con los jefes de los bloques de la oposición para definir el armado de las comisiones. Y es que si bien las sesiones extraordinarias comenzaron hace ya una semana, el proceso de reactivación de la labor parlamentaria avanza con lentitud.