La ministra de Trabajo, Raquel “Kelly” Olmos, criticó al vicepresidente del Departamento de Política Social de la Unión Industrial Argentina (UIA), Julio Cordero, por sus enfáticos dichos en contra de la reducción de la jornada laboral durante el debate en la Cámara de Diputados. «Es como intentar justificar la esclavitud», remarcó la funcionaria en declaraciones a la AM750.

La polémica se desató este martes, durante el debate por la reducción de la jornada laboral en el Congreso, un asunto clave si se tiene en cuenta que la ley de Jornada de Trabajo fue sancionada en 1929, hace casi cien años. En la discusión en Comisión, Cordero rechazó acortar la cantidad de horas diarias de trabajo y se preguntó: ¿Para qué trabajar menos? ¿Está mal trabajar? ¿Estamos en contra del trabajo?».

Olmos aseguró que la posición de la cámara empresaria es “inconsistente” y aseguró que “es como intentar justificar la esclavitud”. Además, cuestionó en medio del debate por una jornada laboral más corta, Cordero asegurara que se debe “generar un mejor clima de trabajo” pero no reducir la jornada.

 

La polémica de Cordero continuó durante su exposición en la comisión de Diputados. «Yendo al fondo con su argumento, sugirió que lo que se debe hacer, en realidad, es seguir extendiendo las horas de trabajo por día». Esto, a pesar de que Argentina es uno de los 20 países con mayor carga laboral. “Yo limito la jornada, entonces usted tiene que trabajar menos. ¿Para qué? ¿Está mal trabajar? ¿Estamos en contra del trabajo? ¿Para ir afuera a hacer qué?”, se preguntó.

A lo que añadió: “Por supuesto, la vida familiar es importante, pero esto ya se debatió. Y como bien se dijo, ya se debatió internacionalmente”.

En este contexto, Olmos salió al cruce con fuerza y lamentó que el dirigente empresarial haya dicho que «el ser humano se realiza trabajando». «Sí, trabajando, pero en condiciones adecuadas, con los límites adecuados y con el salario adecuado”, remarcó la ministra de Trabajo.

Me pareció que fueron muy inconsistentes (sus planteos). Esto es un debate en relación con la legislación laboral. De ser aprobado implica una reforma del conjunto del sistema”, añadió la ministra.

Para la funcionaria, cuando se ponen en una posición “tan extremadamente en contra”, es porque el análisis inicial que hacen es que si se trabaja menos y se cobra lo mismo, hay una redistribución a favor de los trabajadores. “Eso está muy claro. Y manifiestan no estar de acuerdo. Es algo que los moviliza muy en contra”, finalizó.