Las autoridades alemanas alertaron hoy que la segunda ola de la pandemia de coronavirus ya está golpeando al país, tal como lo demuestran las cifras de infección diarias.
«La segunda ola del coronavirus ya está aquí. Ya está ocurriendo todos los días. Tenemos nuevos grupos de infección cada día, que podrían traducirse en cifras muy altas», advirtió Michael Kretschmer, primer ministro del estado federado de Sajonia, citado por el diario Rheinische Post.
Estos comentarios llegan un día después de que el Instituto Robert Koch, encargado de las enfermedades infecciosas, certificara un incremento significativo de las nuevas infecciones diarias, que pasaron de alrededor de 500 a más de 800 durante los últimos días.
«Esta evolución es muy preocupante y continuará siendo vigilada muy de cerca por el Instituto», afirmó anoche una vocera del RKI en declaraciones a la agencia de noticias alemana DPA.
«Debe evitarse un mayor agravamiento de la situación», agregó la especialista.
Las autoridades de salud alemanas reportaron 781 nuevas infecciones en las 24 horas anteriores a la medianoche del viernes.
El día anterior el número de nuevos casos fue de 815. Estas cifras indican que al menos 204.964 personas en Alemania se infectaron con el coronavirus desde el comienzo de la pandemia, detalló hoy el RKI, mientras que el número de muertos en el mismo periodo es de 9.118 personas.
Las cifras se conocen el mismo día en que varios aeropuertos alemanes, entre ellos los de Múnich, Düsseldorf, Colonia/Bonn y Dortmund han comenzado a ofrecer la posibilidad pruebas gratuitas de coronavirus a viajeros que regresan de sus vacaciones en regiones consideradas de riesgo.
Así lo anunciaron voceros de los operadores aeroportuario.
El aeropuerto de Berlín, en tanto, se adherirá la próxima semana y otros aeropuertos también planean hacerlo pronto.
El ministro de Salud, Jens Spahn, está evaluando la posibilidad de obligar a los viajeros a someterse al test, según relató en una entrevista con la emisora de radio Deutschlandfunk.
«Estamos investigando si es legalmente posible, dado que obligar a alguien a hacer un test es una injerencia en la libertad del individuo», señaló el ministro, a la vez que agregó que los tribunales examinan meticulosamente que cada intervención regulatoria respete el principio de la proporcionalidad.
«Haremos posible que cada viajero que regrese a Alemania (y quiera) pueda realizarse un test», explicó Spahn. «Estoy muy a favor de que es preferible hacer un test de más que de menos. Pero básicamente se aplica a las vacaciones lo mismo que en casa: se trata de cuidarnos mutuamente», enfatizó.
Con respecto al reciente aumento del número de nuevas infecciones con coronavirus en Alemania, Spahn dijo que «se debe principalmente a las actividades de viaje, a las personas que regresan de ciertas regiones, en parte de los Balcanes occidentales o de Turquía».
«Lo que tenemos en este momento son muchos pequeños brotes», observó Spahn, y añadió que la pregunta en este momento es «si esto se convertirá en una ola o si se conseguirá detectar rápidamente las cadenas de infección y detenerlas».
Para ello es necesario realizar test de manera específica pero también a gran escala», afirmo el ministro.
