El presidente estadounidense volvió a adjudicarse la victoria libertaria en las elecciones legislativas argentinas. También insistió en que Maduro tiene “los días contados” y no descartó un despliegue militar en Venezuela.
Durante una entrevista con Politico, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a atribuirse un rol decisivo en el triunfo electoral del oficialismo argentino en las legislativas de octubre. “Lo apoyé a Milei. Iba a perder la elección, lo apoyé y ganó de forma aplastante”, afirmó en diálogo con la periodista Dasha Burns.
Trump destacó nuevamente que su respaldo no fue sólo discursivo. En Washington reconocen que su gobierno tuvo un papel activo en momentos de tensión cambiaria en Argentina, a través de la intervención del secretario del Tesoro, Scott Bessent, quien —según sostienen fuentes estadounidenses— operó para sostener el modelo económico libertario en los días críticos previos a la votación.
No es la primera vez que Trump reivindica haber influido en el resultado. A fines de octubre, a bordo del avión presidencial, ya había dicho que Milei “fue un gran vencedor que tuvo mucha ayuda de nosotros”.
Interferencia global
En la misma entrevista, Trump habló de su respaldo a otros líderes, como el primer ministro húngaro Viktor Orbán, e incluso volvió a justificar su intromisión en las elecciones de Honduras, donde llamó a votar por el candidato Nasry “Tito” Asfura. El mandatario expuso así una estrategia de injerencia abierta en procesos electorales de países aliados.
La maniobra de Bessent en el mercado argentino
Tras la derrota libertaria en la provincia de Buenos Aires, el Tesoro estadounidense realizó una inusual compra de pesos para contener la cotización del dólar en el mercado financiero argentino. Paralelamente, se anunció un swap de monedas para reforzar las reservas del Banco Central argentino.
El propio Bessent confirmó la activación de ese mecanismo —silenciado por Buenos Aires— al indicar que formaba parte de la ingeniería financiera para cubrir el costo de la intervención.
“El gobierno de Estados Unidos ganó dinero. Le prestamos dinero a un gobierno para estabilizarlo durante una elección, uno de nuestros grandes aliados en Latinoamérica”, aseguró.
Un respaldo con condiciones
Trump recibió a Milei en la Casa Blanca a mediados de octubre, a dos semanas de las elecciones. Allí, además del apoyo público, deslizó advertencias dirigidas a la sociedad argentina:
“Si Milei gana, estaremos cerca; si no, nos vamos.”
“Si el presidente no vence, no seremos generosos con Argentina”, agregó ante la prensa.
También explicitó una de las principales demandas de Washington: limitar los vínculos con Beijing. “No quisiera que se hicieran tantas relaciones con China… me disgustaría”, señaló.
Venezuela: “Maduro tiene los días contados”
Consultado sobre la situación en Venezuela, Trump elevó el tono: reafirmó que Nicolás Maduro “tiene los días contados” y evitó descartar una intervención militar terrestre.
“No comento eso”, respondió ante la pregunta directa de si considera desplegar tropas estadounidenses. Reiteró que se trata de una “estrategia militar” de la cual no puede hablar, dejando abierta la posibilidad en un momento de creciente tensión por la operación “Lanza del Sur” en el Caribe.
