El cantautor visitó una escuela rural en Misiones, grabará “Solo le pido a Dios” con un coro guaraní y recibirá un Honoris Causa de la Universidad Nacional de Misiones. La emoción por el homenaje a Hugo Soriani en una comunidad que lucha por la tierra y el arraigo de los jóvenes.
Como si el mítico proyecto De Ushuaia a La Quiaca siguiera escribiendo nuevas páginas, León Gieco volvió a llevar su música a una escuela rural. Esta vez fue en Dos Hermanas, una pequeña localidad misionera que limita con Brasil “calle de por medio”, donde el Instituto de Enseñanza Agropecuaria (IEA) N° 17 celebró sus diez años de vida.
La escuela, fundada por docentes que hace una década decidieron apostar al arraigo de los jóvenes y a la defensa de la tierra, recibió al músico con una fiesta popular. Hubo canciones, teatro de títeres, talleres culturales y un homenaje especial a Hugo Soriani, el recordado director de Página/12, cuyo apoyo periodístico ayudó a visibilizar las luchas de la comunidad.
En el pequeño museo escolar, los chicos armaron una pared en su honor, con recortes de todas las notas publicadas sobre el proyecto educativo. “Cada artículo fue clave para que se conozca lo que pasa acá. Conseguir cada cosa es una lucha, y sostenerla, también”, contó Nuria Lantos, coordinadora pedagógica y una de las fundadoras del instituto.
Música, memoria y comunidad
León conoció la historia de la escuela a través de Soriani, y su visita fue un emotivo reencuentro con ese legado. Tras recorrer el predio y abrazar a estudiantes y docentes, cantó en el patio bajo el sol misionero: “La cultura es la sonrisa”, “En el país de la libertad”, “El ángel de la bicicleta” y, junto a los chicos, “Cinco siglos igual” y “Solo le pido a Dios” en portuñol, idioma que mezcla español y portugués y refleja la identidad de frontera.
“Es que a León lo escucho desde la panza de mi mamá”, dijo entre lágrimas una alumna del colectivo cultural Los Aromos, que participó de la jornada pintando un mural con el pañuelo blanco de las Madres y un tucán, símbolo local.
De Misiones al mundo
El viaje de Gieco continuará con dos paradas más: en Santa Ana, donde grabará una nueva versión de “Solo le pido a Dios” junto a un coro de niños guaraníes —en su propia lengua—, y en Posadas, donde la Universidad Nacional de Misiones le entregará el título de Doctor Honoris Causa por su trayectoria artística y compromiso social. Será el tercer reconocimiento de este tipo que recibe en el año.
El ministro de Cultura provincial, Joselo Shuap, acompañó la visita y destacó: “Cada vez que lo convocamos para una movida solidaria, León está. Es uno de los nuestros”.
“Hasta los 106”
El artista suele contar que sigue el ejemplo de Pete Seeger, el legendario trovador estadounidense que decidió dedicar sus últimos años solo a causas sociales. “Él decía que tenía dinero para vivir hasta los 96, y se murió a los 96. Yo digo que tengo hasta los 106, y hasta entonces quiero colaborar con estas causas”, repite León, entre risas.
A cuatro décadas del recorrido de De Ushuaia a La Quiaca, sus canciones vuelven a sonar en patios de escuela, entre tierra colorada, sonrisas y sueños colectivos. Allí donde empezó todo.





