Con la ruptura del bloque catamarqueño de UxP y la incorporación del entrerriano Francisco Morchio, el oficialismo logró su objetivo político central antes de la jura parlamentaria: transformarse en el bloque más numeroso de la Cámara baja. El peronismo quedará con 93 o 94 bancas, según se defina el futuro del puntano Jorge “Gato” Fernández. También hubo tensión por la decisión de Lorena Villaverde de retirar su renuncia y conservar los fueros en Diputados.
A horas de la jura de los diputados electos el 26 de octubre, La Libertad Avanza concretó la maniobra que buscaba desde hace semanas: convertirse en la primera minoría de la Cámara baja. Lo hizo gracias a la ruptura de tres diputados referenciados en el gobernador de Catamarca, Raúl Jalil, y al pase del entrerriano Francisco Morchio. Con ellos, el oficialismo alcanzó las 95 bancas, superando a Unión por la Patria, que quedará con 93 o 94, según lo que resuelva el puntano Jorge “Gato” Fernández.
Los catamarqueños —Fernanda Ávila, Sebastián Nóblega y el diputado electo Fernando Monguillot— conformarán el bloque Elijo Catamarca, que se integrará al interbloque articulado políticamente por el salteño Gustavo Sáenz junto a los gobernadores de Misiones y Tucumán. En tanto, Claudia Palladino permanecerá en UxP.
La incorporación de Morchio, cercano a Rogelio Frigerio, fue confirmada por el entorno del presidente de la Cámara, Martín Menem, entrada la noche. El propio Javier Milei celebró la noticia compartiendo un posteo del jefe del bloque libertario, Gabriel Bornoroni.
Un objetivo cumplido a fuerza de rosca
En poco más de un mes, Menem ejecutó la estrategia pedida por la Casa Rosada: fragmentar al peronismo y disputarle diputados al PRO, a sectores de la UCR y a gobernadores dialoguistas. Según fuentes parlamentarias, las negociaciones incluyeron ofrecimientos concretos, como el control total de Yacimientos Mineros de Agua de Dionisio (YMAD), un reclamo histórico de Catamarca.
La jura de este miércoles definirá además la distribución de comisiones clave, fundamentales para avanzar en las reformas que la gestión Milei se comprometió a implementar.
La batalla por convertirse en tercera fuerza
Mientras LLA se consolida arriba, en el “medio” se libra otra pelea intensa. El armado de Sáenz podría incorporar a los libertarios expulsados hoy agrupados en los bloques MID y Coherencia, sumando seis bancas que lo acercarían a la tercera fuerza de la Cámara.
Pero la disputa está abierta: el espacio Provincias Unidas —que reúne a los gobernadores Llaryora (Córdoba) y Pullaro (Santa Fe)— busca convertirse en ese tercer polo y negocia sumar a Miguel Pichetto, Nicolás Massot, los diputados de la Coalición Cívica y radicales cercanos a Martín Lousteau. La proyección para ese sector es de unos 20 diputados.
En paralelo, un tercer esquema en gestación intentaba reagrupar al debilitado PRO (13 bancas) con un sector de la UCR alineado con Zdero, Cornejo y Valdés, además de avanzar sobre el MID para sumar otras tres bancas. Una suerte de “Juntos por el Cambio” reducido y de emergencia.
Villaverde da marcha atrás y retiene sus fueros
En las últimas horas, Lorena Villaverde —la senadora electa que no pudo jurar por sus presuntos vínculos con el narcotráfico— retiró su renuncia y permanecerá en Diputados, donde tiene dos años de mandato. En la Cámara baja sólo puede ser expulsada con dos tercios de los votos, algo hoy improbable. En el Senado, en cambio, debería enfrentar seis años de exposición política. En el oficialismo deslizan que Patricia Bullrich “no hizo lo suficiente” para facilitar su salida silenciosa.
Lo que viene
La sesión de este miércoles a las 11 marcará renuncias clave, como la del ministro del Interior, Diego Santilli, y la de Silvia Lospennato, quien asumirá como legisladora porteña. Después, llegará la jura de los nuevos diputados y el inicio formal de una Cámara que, tras el reacomodamiento, queda hiperfragmentada y con un oficialismo fortalecido.
