El gobernador bonaerense y la expresidenta se reencontraron en San José 1111 tras meses de distancia política. Hablaron del escenario social, las elecciones y enviaron una señal clara al peronismo.
En una tarde cargada de simbolismo para el peronismo, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, se reunió con Cristina Fernández de Kirchner en su domicilio de San José 1111, en el barrio porteño de Constitución. El encuentro, que duró una hora y media y se desarrolló sin presencia mediática, marcó el primer cara a cara entre ambos desde la detención de la exmandataria en junio pasado.
“Fue un buen encuentro”, coincidieron voceros de ambos entornos tras la reunión, que sirvió para limar asperezas y trazar una estrategia común frente a las elecciones nacionales del próximo 26 de octubre.
Unidad, gestión y campaña
El eje de la conversación giró en torno a la necesidad de consolidar la unidad de Fuerza Patria, espacio que reúne al kirchnerismo y sectores del peronismo con base fuerte en la provincia de Buenos Aires. Con encuestas que muestran una ventaja clara en ese distrito, el diálogo apuntó a capitalizar el resultado de las legislativas bonaerenses, en las que el oficialismo sacó más de 13 puntos de ventaja.
Desde el entorno del gobernador y de la expresidenta coincidieron:
“Hay que sumar fuerzas para octubre”.
El encuentro también incluyó análisis sobre la situación social, el escenario internacional y el contexto político que atraviesa el país bajo la gestión de Javier Milei.
El reencuentro tras la distancia
La última vez que Kicillof y CFK compartieron espacio fue el 10 de junio, en la sede del PJ, antes de que se ejecutara la orden de detención de la expresidenta. Desde entonces, aunque el mandatario bonaerense sostuvo un apoyo público a Cristina, las tensiones internas por temas como el desdoblamiento electoral y la conducción del espacio profundizaron la distancia entre La Cámpora y el Movimiento de Defensa Federal (MDF).
Sin embargo, el triunfo en las legislativas bonaerenses abrió la puerta a una nueva etapa de diálogo. Fuentes cercanas a CFK habían anticipado que “Cristina recibe a todos”, y desde el entorno de Kicillof se esperaba la habilitación judicial necesaria para la visita, que finalmente se concretó este miércoles.
Cristina, Milei y el frente judicial
Horas antes de la reunión, la expresidenta había reaparecido con un mensaje dirigido a Javier Milei. Cuestionó al presidente por “el desconcierto económico” y criticó al equipo económico tras una aclaración del BCRA sobre la venta de dólares en billeteras virtuales.
También mencionó el escándalo que involucra a José Luis Espert —candidato a diputado nacional por La Libertad Avanza— y su presunta vinculación con el narco Fred Machado, un tema que ha ganado relevancia en los últimos días.
Kicillof sigue en campaña
Por su parte, Axel Kicillof viajará este viernes a Mar del Plata, en el marco de su estrategia de campaña: recorrer el conurbano y el interior con eje en la gestión. Educación, salud, obra pública y el poder adquisitivo son los pilares de su propuesta para reforzar el perfil de Fuerza Patria como la alternativa al modelo libertario.
“Libertad es llegar a fin de mes”, repiten cerca del gobernador, en contraposición directa con el discurso económico del oficialismo nacional.
La reunión en San José 1111 no solo fue una postal buscada, sino una señal de unidad política que el peronismo venía reclamando desde hace meses. En un contexto electoral decisivo, Kicillof y Cristina volvieron a verse las caras, y el mensaje fue claro: el peronismo sigue en pie y quiere disputar el poder con una propuesta propia, lejos del ajuste y con eje en la gestión.





