La expresidenta respaldó la candidatura del exgobernador salteño, que busca llegar al Senado en las legislativas de octubre. «Las diferencias del pasado son nimiedades», afirmó Urtubey.
En un gesto político que marca un cambio de etapa, la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner recibió en su departamento del barrio porteño de Recoleta al exgobernador de Salta Juan Manuel Urtubey, con quien no mantenía reuniones formales desde hacía más de una década. El encuentro, que tuvo lugar en el histórico domicilio de San José 1111, representa un respaldo explícito al armado salteño de Fuerza Patria, la coalición opositora que busca fortalecerse de cara a las elecciones legislativas de octubre.
La reunión fue difundida por ambos dirigentes a través de sus redes sociales, donde compartieron una imagen juntos y mensajes enfocados en la unidad del peronismo para enfrentar al oficialismo libertario.
Reencuentro tras una larga distancia
Urtubey, quien gobernó Salta entre 2007 y 2019, se había alejado del kirchnerismo en 2018, cuando fue uno de los impulsores de Alternativa Federal, un espacio que intentó construir una “tercera vía” entre el macrismo y el Frente de Todos. Luego, en 2023, fue candidato a vicepresidente de Roberto Lavagna, profundizando su alejamiento del espacio que lidera Cristina Kirchner.
Sin embargo, la derrota del oficialismo en la provincia de Buenos Aires el pasado domingo —que golpeó al gobierno de Javier Milei— parece haber generado un nuevo impulso para reagrupar fuerzas en el peronismo. En ese contexto, el reencuentro entre CFK y Urtubey cobra especial relevancia simbólica y estratégica.
“Cuando uno ve todo lo que está pasando, es imposible no darse cuenta de que las diferencias del pasado son nimiedades”, había declarado Urtubey días antes del encuentro, anticipando su giro hacia la unidad.
Un mensaje de unidad y campaña
El exgobernador asistió al encuentro acompañado por el diputado nacional Emiliano Estrada, otro referente de Fuerza Patria en Salta. Tras la reunión, Urtubey publicó un mensaje conciliador en sus redes sociales, acompañado por la foto junto a la expresidenta:
“Unir fuerzas por Salta. Unir fuerzas por la patria. Unir fuerzas por nuestro pueblo. Nada se construye con odio. Mucho menos un país. Unamos fuerzas para poner freno a la ceguera y la agresión, para ponernos juntos de pie y hacer escuchar la voz de quienes no son escuchados. Fuerza Patria. Fuerza Salta.”
El mensaje fue replicado por Cristina Kirchner en su cuenta oficial, un gesto que no pasó desapercibido en la escena política nacional.
Objetivo: recuperar terreno en el norte
Urtubey es actualmente el principal candidato de Fuerza Patria en Salta, y busca ser electo senador nacional en octubre. Su candidatura se enmarca en una estrategia más amplia de la coalición opositora para reconquistar espacios en el interior del país, especialmente en distritos donde el peronismo se encuentra fragmentado o relegado.
La provincia de Salta es hoy gobernada por Gustavo Sáenz, exaliado de Sergio Massa, que mantiene un vínculo tirante con el oficialismo nacional. En ese escenario, Urtubey busca presentarse como una alternativa peronista con proyección federal, alineada con la estrategia de relanzamiento del espacio que impulsa CFK.
Además, fue uno de los primeros dirigentes en celebrar el triunfo de la oposición en Buenos Aires, y vinculó ese resultado con el proyecto nacional:
“En la provincia de Buenos Aires la fuerza de los argentinos le puso un freno a Milei. En octubre ese freno lo ponemos los salteños con Fuerza Patria”, escribió en redes sociales.
¿Una nueva etapa en el peronismo?
El acercamiento entre Cristina Kirchner y Juan Manuel Urtubey no sólo tiene un valor electoral. También refleja el intento del peronismo de reconstruirse después de años de internas y divisiones, en un contexto en el que el gobierno de Milei enfrenta desgaste político y social, y la oposición busca ampliar su base de apoyo de cara a 2026.
No está claro aún si esta reunión abrirá la puerta a futuras alianzas más amplias o si se trata de un gesto acotado a lo provincial. Sin embargo, en la antesala de las legislativas, el peronismo da señales de pragmatismo político, dispuesto a suturar viejas heridas con el objetivo de recuperar protagonismo en el Congreso y en los territorios.
