La comunidad armenia de la Argentina publicó una carta abierta en repudio a la vicepresidenta Victoria Villarruel, luego de que participara en el Senado de un acto junto al embajador de Turquía en el que —según denunciaron— se convalidó el discurso negacionista del gobierno turco sobre el Genocidio Armenio.
El evento, titulado “El rol de la República de Turquía en el nuevo orden mundial y su proyección en Sudamérica”, se llevó a cabo la semana pasada y contó con la participación del embajador Süleyman Ömür Budak, además de los académicos Juan Bautista González Saborido y Mauro Labombarda, de la Universidad del Salvador.
Duro comunicado de la comunidad armenia
Las Instituciones Armenias de la República Argentina (IARA) cuestionaron con firmeza las declaraciones de Villarruel, quien definió a Turquía como “un mediador confiable, un promotor de la estabilidad y un socio estratégico en la construcción del nuevo orden internacional”.
“Caracterizar a Turquía como promotor de la estabilidad en el Cáucaso y un socio comprometido con la paz no puede ser entendida sino como una broma de mal gusto sugerida por algún asesor poco informado o, en el peor de los casos, con intereses espurios”, expresaron.
El comunicado recordó que Turquía:
- mantiene negado el Genocidio Armenio, en el que fueron asesinados más de 1.500.000 armenios entre 1915 y 1923;
- ha perseguido históricamente a minorías cristianas y kurdas;
- apoyó militar y políticamente a Azerbaiyán en la guerra de 2020 y en la limpieza étnica del enclave de Artsaj en 2023.
“La solución armada que en 2020 iniciaron Azerbaiyán y su ‘Madre Patria’, Turquía, representó para el pueblo armenio una nueva pérdida de territorios históricos y miles de muertos, exiliados y prisioneros, además del desplazamiento forzado de familias enteras”, detallaron desde IARA.
Críticas al argumento económico
La entidad también rechazó que el acercamiento con Turquía pueda justificarse en términos de conveniencia económica.
Recordaron que la comunidad armenia “ha contribuido con mayor vigor y ahínco al desarrollo de la economía nacional que las módicas cifras del comercio exterior turco-argentino” y cuestionaron si un eventual beneficio comercial puede justificar “dejar atrás el claro posicionamiento argentino respecto del genocidio”.
Argentina reconoce oficialmente el Genocidio Armenio a través de los tres poderes del Estado, y la Cancillería —incluso bajo la gestión actual— continúa conmemorando cada 24 de abril como el Día de Acción por la Tolerancia y el Respeto entre los Pueblos.
El acto en el Senado
Durante el evento, los expositores turcos y sus acompañantes presentaron una visión de Turquía como país pacifista y ajeno a conflictos regionales, afirmando que no participa en guerras interestatales desde 1923 y que “no ha ganado territorio a través de guerras”.
Los argumentos fueron cuestionados por la comunidad armenia, que recordó el rol del Imperio Otomano en el genocidio de armenios, griegos y asirios, así como el apoyo reciente del Estado turco a Azerbaiyán en el Cáucaso.
En su intervención, Villarruel insistió en destacar a Turquía como un “promotor de la estabilidad”, una postura que para las organizaciones armenias contradice la tradición diplomática argentina y el consenso histórico sobre el genocidio.
