La vicepresidenta respondió a críticas en Instagram y negó una ruptura con el oficialismo: “No robo, laburo mucho y no he realizado traición alguna”
Un posteo institucional terminó desatando una nueva polémica entre la vicepresidenta Victoria Villarruel y los seguidores libertarios más cercanos al presidente Javier Milei. Lo que comenzó como la difusión de una reunión diplomática terminó convertido en un cruce directo en redes sociales, con respuestas de tono político y frases que muchos interpretaron como indirectas hacia la Casa Rosada.
Todo comenzó cuando Villarruel publicó en su cuenta de Instagram una fotografía junto a Shea Bradley-Farrell, titular del Instituto estadounidense Counterpoint para la Política, la Investigación y la Educación.
“Hoy mantuve un valioso encuentro en el Senado de la Nación con la Dra. Shea Bradley-Farrell. Coincidimos en que fortalecer los lazos entre Argentina y Estados Unidos es clave para abrir nuevas oportunidades de cooperación en inversión, seguridad y desarrollo para nuestra región”, escribió la vicepresidenta.
Cruces y acusaciones en redes
Poco después de la publicación, el posteo se llenó de comentarios críticos. Algunos usuarios la acusaron de “traicionar” al presidente Milei, de acercarse al peronismo e incluso de buscar protagonismo político propio.
Antes de que la funcionaria limitara los comentarios, alcanzó a responder a varios mensajes.
“Ustedes creen que se debe ser servil y obsecuente, y yo no lo soy”, replicó Villarruel a un seguidor que la había acusado de “creerse más que el presidente”.
La tensión entre ambos dirigentes no es nueva. Días atrás, trascendió que Milei y Villarruel dejaron de seguirse en Instagram, tras los dichos del cineasta Santiago Oría, responsable de la imagen presidencial, quien había asegurado que la vice pidió cerrar la escuela donde debía votar para evitar hacer fila. La versión fue desmentida por ella.
“No robo, laburo mucho y no he realizado traición alguna”
Ante las críticas por su supuesta cercanía con el gobernador formoseño Gildo Insfrán, con quien compartió un acto semanas atrás, Villarruel respondió con ironía:
“El chiste se cuenta solo cuando vemos las listas llenas de peronistas. Pero no estás preparado para esta charla.”
Luego, en medio de la discusión, lanzó una frase que se interpretó como una defensa personal y, al mismo tiempo, una indirecta hacia el entorno del presidente:
“Lo importante es que los ciudadanos sepan que no robo, laburo mucho y con responsabilidad, y no he realizado traición alguna. El resto son chismes de panadería.”
Entre la ironía y la defensa propia
El intercambio continuó con mensajes de apoyo y críticas. Una usuaria le sugirió “dedicarse a otra cosa”, a lo que Villarruel respondió:
“Porque en esta soy muy buena. Y decente, lo que es una condición en extinción.”
Con esas frases, la vicepresidenta cerró una jornada de tensión virtual en la que volvió a marcar distancia del núcleo libertario más duro, mientras buscaba reafirmar su perfil institucional y diferenciarse del estilo confrontativo de Milei.
