Murió Giorgio Armani, el “rey” de la moda italiana, a los 91 años

El diseñador falleció en su casa de Milán, rodeado de sus seres queridos. Fue una figura clave de la moda del siglo XX y XXI, y uno de los grandes embajadores del estilo italiano en el mundo.

Giorgio Armani, el legendario diseñador italiano y símbolo absoluto del estilo, murió este jueves a los 91 años en su residencia de Milán, según confirmó el Grupo Armani en un comunicado oficial.

«Con una tristeza infinita, el Grupo Armani anuncia el deceso de su creador, fundador y motor infatigable: Giorgio Armani», expresó la empresa, fundada por el propio diseñador en 1975, y convertida en una de las casas de moda más influyentes del mundo.


Una vida dedicada a la elegancia

Apodado “el rey de la moda italiana”, Armani revolucionó el diseño con su estética sobria, sus trajes desestructurados y una visión de la moda marcada por la elegancia atemporal. Diseñó para estrellas de cine, empresarios, presidentes y millones de personas que encontraron en su ropa un sinónimo de sofisticación.

En sus últimos días, Armani se encontraba convaleciente en su casa de la Via Borgonuovo, luego de una internación por una infección pulmonar que lo obligó a ausentarse por primera vez en años de los desfiles de alta costura masculina, en junio pasado.

Falleció acompañado de su familia y de su pareja y colaborador cercano durante más de dos décadas, Leo Dell’Orco.


El adiós del Grupo Armani: “Nos deja nuestro guía”

«El señor Armani, como siempre lo han llamado con respeto y admiración sus empleados y colaboradores, falleció tranquilamente, rodeado de sus seres queridos. Incansable, trabajó hasta sus últimos días, dedicándose a la empresa, a las colecciones y a los nuevos proyectos», señaló la firma en el comunicado que difundió la noticia.

«Hoy, con profunda emoción, sentimos el vacío que deja quien fundó esta familia y la hizo crecer con visión, pasión y dedicación», agregaron.

La familia confirmó que la capilla ardiente se instalará el sábado 6 y domingo 7 de septiembre en el Armani Teatro de Milán, mientras que el funeral será privado, tal como había expresado Armani en sus últimas voluntades.


Repercusiones en Italia y en el mundo

La muerte de Armani generó una inmediata ola de homenajes en Italia. La primera ministra Giorgia Meloni escribió:

«Con su elegancia, sobriedad y creatividad, supo dar prestigio a la moda italiana e inspirar al mundo entero. Un ícono, un trabajador incansable, un símbolo de la mejor Italia».

La diseñadora Donatella Versace también se expresó conmovida:

“Perdimos a un gigante que ha hecho historia y será recordado para siempre”.

Desde el gobierno, el ministro de Cultura Alessandro Giuli lo definió como «un referente indiscutible de la cultura italiana», mientras que el vicepresidente y ministro de Transporte Matteo Salvini sostuvo:

«Se va una excelencia italiana reconocida y admirada en todo el mundo. Su legado seguirá brillando en la historia y en el futuro del Made in Italy».


El legado de una leyenda

A lo largo de cinco décadas, Giorgio Armani cambió las reglas del lujo. Desde los trajes sin hombreras que redefinieron la silueta masculina, hasta la creación de Emporio Armani, Armani Privé o Armani Exchange, su imperio cruzó generaciones y fronteras.

Fue también un gran impulsor del diseño en el cine: vistió a Richard Gere en “American Gigolo”, a innumerables celebridades en alfombras rojas, y fue uno de los primeros diseñadores en entender la moda como un puente entre arte, cultura y negocios.

Discreto, reservado, perfeccionista y profundamente apasionado por su oficio, Armani nunca se alejó del trabajo, incluso cuando su salud comenzaba a deteriorarse.

“Adorado Giorgio… por estos 27 años de amistad que nos han unido, mucha gratitud”, escribió el director de cine Ferzan Özpetek.


Una ausencia imborrable

La moda mundial pierde a una de sus voces más elegantes y consistentes. Italia despide a un símbolo. Y el mundo, a un maestro que transformó la manera en que nos vestimos, nos vemos y nos presentamos ante los demás.

Giorgio Armani (1934–2025). Su legado no pasará de moda.

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