La influencia financiera se consolida en el corazón del Gobierno libertario. Con la designación de Alejandro Lew como nuevo secretario de Finanzas, ya son siete los altos funcionarios del gabinete de Javier Milei que trabajaron para el banco de inversión estadounidense JP Morgan.
Desde el Ministerio de Economía hasta la Cancillería, la estructura del Ejecutivo parece calcada del sector financiero global, en un escenario de alineamiento total con los intereses de Estados Unidos.
Alejandro Lew, el último en sumarse
El flamante secretario de Finanzas Alejandro Lew se convierte en el nuevo ex JP Morgan dentro del Gobierno.
Viene de desempeñarse como vicepresidente del Banco Central durante la gestión libertaria, aunque también fue gerente de Finanzas de YPF bajo el gobierno de Alberto Fernández.
Desde el massismo lo acusaron de haber tomado decisiones que contribuyeron al desabastecimiento de combustibles previo al balotaje de 2023. Antes de eso, trabajó en Deutsche Bank, HSBC e Itaú, además de haber pasado por el JP Morgan en Nueva York, especializado en mercados emergentes.
Su incorporación eleva a siete el número de ex ejecutivos del banco estadounidense que hoy ocupan cargos clave en el gobierno argentino.
Luis “Toto” Caputo
Ministro de Economía
El hombre fuerte del Palacio de Hacienda fue jefe de trading para América Latina en JP Morgan entre 1994 y 1998, manejando bonos y acciones de la región.
Su carrera está marcada por su perfil de operador financiero más que de economista de política pública.
Tras su paso por el macrismo —como secretario de Finanzas, ministro de Economía y presidente del BCRA— volvió al centro del poder con Milei, consolidando la impronta del banco en la política económica argentina.
José Luis Daza
Secretario de Política Económica
Ex director gerente y jefe de investigación de mercados emergentes en JP Morgan, trabajó junto a Caputo entre 1992 y 2000.
Hoy funciona como viceministro de Economía de facto, el principal articulador entre el Palacio de Hacienda y los organismos internacionales de crédito.
Santiago Bausili
Presidente del Banco Central
Once años en JP Morgan (1996–2007) como vicepresidente de mercados de capitales y derivados para Argentina, Chile y Perú.
Su carrera posterior incluye cargos en Deutsche Bank y en el propio Ministerio de Finanzas durante el macrismo.
Hoy, al frente del BCRA, es considerado el brazo técnico de Caputo dentro de la política monetaria.
Pablo Quirno
Ministro de Relaciones Exteriores
El actual canciller también fue director para América Latina en JP Morgan, desde la sede de Nueva York.
Su llegada a la diplomacia marca la expansión del perfil financiero del Gobierno hacia el plano internacional, en un contexto de estrecha alineación con Estados Unidos, coronado por su encuentro con el embajador Peter Lamelas.
Vladimir Werning
Vicepresidente del Banco Central
Economista de carrera, pasó 20 años en JP Morgan (1996–2016), donde fue director ejecutivo y economista jefe para América Latina.
Hoy se desempeña como número dos del BCRA, encargado del monitoreo macroeconómico y las relaciones técnicas con el FMI.
Damián Reidel
Presidente de Nucleoeléctrica Argentina
Científico y financiero, trabajó en JP Morgan en el área de mercados emergentes antes de dedicarse al sector energético.
Fue jefe de Gabinete de Asesores de Milei y, desde abril de 2025, preside Nucleoeléctrica Argentina, empresa pública que el Gobierno planea privatizar.
Un gabinete moldeado por Wall Street
La lista completa muestra un núcleo económico y político con ADN del JP Morgan, uno de los bancos más influyentes del planeta.
En la práctica, el sector financiero global ocupa posiciones estratégicas en el Ministerio de Economía, el Banco Central, la Cancillería y las empresas estatales.
Lejos de ser un fenómeno aislado, esta colonización técnica y política reproduce la lógica del mercado en la gestión del Estado.
La “timba”, como la denominan sus críticos, avanza sobre distintas áreas del poder público, consolidando un gobierno que traduce la visión del capital financiero en decisiones de política nacional.
